En el corazón de los Alpes, donde el horizonte parece más amplio y la vida cotidiana queda en silencio, el chalet abre sus puertas a todos aquellos que buscan algo especial. Esta casa de vacaciones de diseño moderno combina líneas claras con estilo alpino. Cuatro dormitorios, una amplia sala de estar y comedor con espacio suficiente para hasta ocho personas, ya sean familiares, amigos o un grupo pequeño. Desde el salón se accede directamente a la terraza amueblada con vistas a la naturaleza. Los grandes ventanales aportan luz y paisaje al interior. En invierno, la diversión del esquí comienza prácticamente en la puerta de casa: la pista más cercana está cerca y, en determinados momentos del día, un servicio de transporte lleva cómodamente a los huéspedes hasta allí. En verano, justo detrás de la casa le esperan rutas de senderismo y el aire puro de la montaña. Especialmente popular es el hot pot privado, disponible en la terraza y que promete horas de relax en cualquier época del año. La sauna del hotel ofrece la manera perfecta de relajarse después de un día en la naturaleza o en las pistas. Los compañeros de cuatro patas también son bienvenidos: los bosques y prados que rodean la casa invitan a pasear juntos. Una arquitectura bien pensada, materiales naturales y una ubicación tranquila cerca del Grünsee hacen de esta casa el refugio perfecto para los huéspedes que valoran la privacidad y la funcionalidad, sin muchos lujos, pero con ese algo especial.